En la siguiente imagen podemos apreciar el tramo de subida que hemos realizado desde el parking. En primer término vemos el Peñotillo Bajo.
Aparece la nieve y rodeamos con cuidado el Peñotillo en dirección este hasta la Maliciosa cuyas paredes ya vemos. Jesús en la travesía.
Desgraciadamente para nosotros la canal que separa el Peñotillo de La Maliciosa apenas si tiene trazas de nieve. Vemos un amplio collado en la cuerda que arranca de los cantiles de la Maliciosa, y algunos de los excursionistas que nos preceden se dirigen a él. Nosotros optamos por acceder un poco más arriba justo en un colladito en la base de las paredes. Al no haber apenas nieve atravesar la canal del Peñotillo se hace más incomodo con barro, piornos y piedras sueltas. Por fin llegamos. Vemos la Maliciosa Baja, el collado de las Vacas, y detrás la Pedriza.
Aquí nos ponemos el casco, nos calzamos los crampones y sacamos el piolet. Ahora hay que rodear siempre en dirección este las paredes verticales que descienden de la cumbre. Primero descendemos unos cuarenta metros.
Rodeamos los cortados, la nieve está regular, pero no te hundes.
Vemos la vía Toñi, sólo tiene hielo o nieve en su parte media, una pena, pues es digna de ver en plenitud, Al atravesar por su inicio caen trozos de hielo, e incluso una piedra del tamaño de un puño. El casco es obligatorio en este tipo de rutas. Al comenzar a ascender la canal se desvía a la izquierda y comienza el Tubo de Todos. En este inicio la nieve esta algo blanca, pescadería que dicen los esquiadores, pero se progresa bien.
Llegamos a una bifurcación, de frente el Tubo Este que a la sombra de los riscos parece tener buena nieve. Girando a la izquierda nosotros continuamos por el Tubo de Todos. En su parte media la nieve mejora. Los crampones agarran bien, pero fuera de la huella hay que extremar la precaución. Lo que dejamos atrás.
Lo que nos queda por delante.
El Tubo Este
Poco antes de culminar el tubo cabe la posiblilidad de desviarse a la izquierda y llegar practicamente a la cima de la Maliciosa. Nosotros seguimos de frente, los últimos venticinco metros la pendiente se endereza notablemente y la nieve está más dura. Un segundo piolet no me hubiera venido mal. En condiciones más desfavorables es, por supuesto indispensable. Llegada arriba.
La cumbre es un hervidero de gente. Increíble.
Las vistas hacia el norte nos desvelan como las anormales temperaturas se llevan la nieve progresivamente. Bola del mundo, Valdemartín, por detrás asoma Peñalara.
Cabezas de Hierro, Pedriza Posterior, Asómate de Hoyos.
Al oeste Peñota, Peña del Águila, Siete Picos, Montón de Trigo, Mujer Muerta. A la izquierda a lo lejos La Serrota.
En la anterior imagen vemos en primer término como la cabecera de la garganta sur o del Infierno está escasa de nieve. Esta amplia canal flanqueada por el Peñotillo y los Riscos de la Maliciosa, es una buena opción para bajar, ya que lleva directamente al parking de la Barranca. Pero también es incómoda sin nieve con mucha piedra y matorral. La desestimamos, y tras comer un bocadillo emprendemos la bajada por la va normal; por el collado Piornal y el regajo del Pez.
Fue un error, nieve blanda, sobrepisada, húmeda y resbaladiza por la gran cantidad de gente que continuamente subía y bajaba. Un chaval joven y grande resbaló y a punto estuvo de tirarme. Para evitar aglomeraciones bajamos hasta el fondo de la vaguada que conservaba nieve limpia hasta donde los puentes de nieve nos lo permitieron. En fin, conseguimos refrescarnos en la bonita fuente de la campanilla.
Cerramos la circular en la Barranca y nos tomamos una cervecita en una terraza de Matalpino, desde donde teníamos estas vistas. Casualidades de la vida.
Para terminar les dejo el mapa de la ruta impreso desde el visor cartográfico PLANEA de la web Madrid.org. Saludos