A pesar de haber dormido poco y madrugado mucho, llegamos a los ocho y diez a la barrera del puente de las juntas por lo que nos tocó pagar el peaje. La temperatura ideal, fresquito, las nubes rasgando el sol, brisa suave y fresca, que más se puede pedir un quince de agosto.
Arrancamos con decisión y en una hora u tres cuartos nos plantamos en el circo. Imágenes que siempre agrada volver a ver.
Pequeña parada para comer algo, y salimos raudos hacia el primer objetivo del día, el Almeal.
Comenzamos a ascender por detrás del refugio, dirección oeste, evitando ir mucho hacia la izquierda para no coger el camino del Almanzor. Todo para arriba como se ve en la imagen
Ascendemos por un pequeño desfiladero
Hasta llegar a un rellano herboso desde donde vemos las posibilidades de ascensión. A la izquierda la canal de los geógrafos que rodea el Almeal por sus paredes sur hasta el rellano homónimo, y desde allí asciende por la canal oeste. De frente marcada en rojo una encajada canal que sube directa al collado que separa el Almeal del Risco Moreno, en algún sitio he visto
que la llaman canal negra. Esta vía es más corta y rápida y además inédita para mí. Por esta subiremos.
Entramos en el mundo vertical de Gredos. La canal tiene mucha pendiente con varios bloques empotrados en su recorrido, alguno de los cuales hay que salvar con pasos de grado II. Imágenes.
Por fin llegamos a los pies del Risco Moreno.
Desde aquí observamos el collado entre el risco Moreno y el cresterío del Cerro de los Huertos por encima de la punta Esperanza. A Miguel le parece interesante ir a verlo. El collado da vista al Gargantón con buenas vistas de los riscos circundantes.
Placas norte del Risco Moreno y Gargantón.
Punta Esperanza y Galana
Bonita y curiosa panorámica
Mis compañeros con la Punta Esperanza detrás
Volvemos hacia el collado del Almeal.
A unos metros de coronar salen a nuestra izquierda los hitos que nos llevan a los bloques cimeros. Por terreno a veces inestable y bastante expuesto ascendemos por algunos pasos de grado II hasta las piedras cimeras. Hace veinte años realicé esta ascensión y en la foto de mi perfil estoy sentado en una piedra que se considera cumbre, aunque de frente tengo al yunque que es la cima más alta. Ciertamente en esta ocasión no vi la forma de acceder a ella, la verdad es que me ofusqué buscando vías a media ladera, cuando la solución la tenía en los bloques cimeros. Para otra ocasión ya voy avisado. Nos quedamos como a unos cinco metros por debajo del yunque en un pasillo que tenía a la derecha esta piedra, pero no fui capaz de darme cuenta. Imágenes de cumbre.
Cuando mis compañeros lograron convencerme para que dejara de buscar, descendimos rápidamente, primero al collado, y después por la canal oeste al rellano de Almeal.
En este bonito lugar paramos a reponer fuerzas para ascender la Galana que teníamos de frente. La piedra no se me iba de la cabeza. Subimos directamente por la canal que se ve en la imagen.
Al coronar la canal ascendemos a la derecha por grandes bloques hasta la muesca, brecha que hay que descender para comenzar la trepada a la cumbre. La bajada aunque fácil tiene mucho patio por lo que hay que extremar la precaución. La trepada tiene una chimenea pequeña de grado II y al llegar a la base de las rocas cimeras hay que rodear por la izquierda, oeste, y ascender por una losa inclinada fácil pero con una caída importante a la vertiente de las cinco lagunas
Llegamos a la cumbre. En ella alguien ha dejado una piedra de color marrón que sirve como muestra trofeo del éxito de la ascensión. Fotos de cumbre.
Las vistas son magníficas.
El flanqueo jodidillo bajando
Dejamos la Galana y vamos a por el último, el Almanzor.
Vista del Almeal desde el Venteadero.
Seguimos los hitos por la ladera que da al Circo del cuchillar de Ballesteros, sube y baja salvando contrafuertes hasta que vemos una estrecha y empinada chimenea que termina en la portilla de los cobardes. No tomar la portilla más amplia que queda a la derecha y que que no lleva más que a los abismos.
Desde aquí rodear hasta la base de la chimenea.
Las canales oscuras y al fondo la Garganta Tejea.
Trepamos por la chimenea bien protegida salvando algún paso de grado II. Cumbre
Desde la cima contemplamos los dos picos ascendidos anteriormente.
A pesar de la fatiga bajamos hacia el circo rápidamente.
En el Circo reponemos fuerzas para emprender la más dura de las subidas, la de los Barrerones al volver. Todo acaba y nosotros volvemos a la plataforma bastante cansados pero contentos por haber disfrutado de un día de montaña perfecto.
Para terminar unos machos cabríos en los Barrerones.
